SINOPSIS:
Nacida a mediados del siglo IV de nuestra era, Hypatia fue
la hija del matemático y astrónomo Teón, el último director del museo de
Alejandría. Muy pronto superó en conocimientos a su padre, convirtiéndose en la
maestra de un selecto grupo de estudiosos que hicieron de Alejandría uno de los
centros de investigación más conocidos de la Antigüedad. La joven iba a suceder
a su padre en el cargo de directora, pero el fanatismo de la Iglesia católica
provocó la destrucción del museo y de la biblioteca. En el año 415, la misma
Hypatia fue violada, torturada y despedazada por un grupo de fanáticos
cristianos a las órdenes de patriarca de la ciudad, pero su nombre ha ido
recorriendo la historia y aún hoy se la recuerda como símbolo de una
inteligencia privilegiada que desafió el oscurantismo de su época.
OPINIÓN
PERSONAL: A1.
Echando un
vistazo a la sección de libros en el centro comercial encontré el libro
Hypatia, lo cogí solo por su portada, pero tras leer la sinopsis me enamoré aún
más. No lo compré, un error que me persiguió durante semanas hasta que volví
solo para comprarlo. Cuando empecé a leerlo estaba emocionada, pero mi emoción
se esfumó al leer el PROPÓSITO del libro. La forma de redactar del escritor no
me gustó nada en absoluto. Seguí leyendo y era horrible.
El
libro tiene 262 páginas y en las 101 primeras no cuenta ni una sola línea sobre
Hypatia, tan solo cuenta la historia de los imperios de una forma lenta, densa
y es un absoluto caos, mi cerebro se hizo polvo al leer la historia del Imperio
Romano de esa mala manera, historias que he leído mil veces y aún así no me enteré
de nada de lo que contaba. Leía y leía sin avanzar ni comprender nada de lo que
narraba, mi mente se iba a otro lugar y pensaba en mis cosas hasta que me daba
cuenta de que llevaba minutos leyendo la misma línea.
Cuando
parecía que iba a salir Hypatia en la página 102 volvía a hablar de la historia
de Roma o de cualquier otro filósofo griego, alejándose de lo principal. No
explica bien, se anda por las ramas durante párrafos que no expresan nada ni
son importantes, tan solo hacen que el libro sea un caos y que pierdas el hilo.
Menciona a muchísimos personajes famosos como Teón, Fidias, Ptolomeo, Homero,
Arsinoe, Herón, Pitágoras, Hipócrates, Alejandro Magno, Cleopatra, Marco
Antonio, Octavio, Augusto, Pappo, Arquímedes, Aristóteles, Zenódoto, Calímaco,
Julio César y cientos de nombres más. Qué pesado... si dices que cuenta bien
sus historias, pues bueno, aún se leen a gusto, pero es que no sabe contarlas
bien, no les da importancia, no transmite sentimientos cuando narra, es como si
se acordase de datos mientras escribe la historia y cuando se da cuenta que se
aleja vuelve a ella como si nada.
No sigue
un orden cronológico correcto, lo mismo le da empezar a narrar una historia y
continuarla veinte páginas después. Compré el libro con la esperanza de aprender
un poco más sobre este tema que me resulta fascinante, pero no he aprendido
nada. Demasiados adjetivos seguidos que alargan frases sin sentido. Muchas
veces me daba la sensación de que había párrafos y frases sin terminar, como si
se quedase a medias, las volvía a leer y seguía sin encontrar sentido a lo que
quería decir. Tuve que usar la RAE en más de una ocasión, pero igual que usa
palabras rebuscadas con sinónimos simples, también usa palabras coloquiales,
vulgares y citas incorrectas para el año 300 d.c. Pienso que se pasa de
pedante, que rebusca las palabras para que las frases le queden mejor, pero no
mantiene esa imagen.
Me costó
mucho leerme el libro, quería terminarlo porque soy incapaz de dejar un libro a
la mitad, pero lo terminé de malas maneras pasando hojas y dejando párrafos
enteros sin leer. No vuelvo a repetir con este autor, creo que era una historia
fantástica que no ha sabido narrar bien, una lástima porque me había llamado
mucho la atención.
La
sinopsis me engañó por completo. Creo que el título del libro no debería ser
HYPATIA, sino TEÓN, pues realmente cuenta su historia y no la de su hija.
¡Hola!
ResponderEliminarQué rabia da que te llame un libro y luego te disguste tanto.
He estado un poquito ausente, pero por aquí sigo :)
¡Besos!